Estas son las galletas clásicas, de hecho si quieres no les pones las chispas y te quedan como galletas de té. Esta es una receta fácil y rápida, y tan práctica que te permite cocinar en un santiamén unas deliciosas golosinas para la lonchera de los niños
En 15 minutos tendrás las galletas perfectas para una reunión entre amigos, para hacer una cajita de regalo, o para una merienda. Esta receta es tan práctica que puedes refrigerar la masa y tenerla lista para cuando la necesites.

Vas a necesitar:
350 g de harina
200 g de mantequilla
100 g de azúcar morena
100 g de azúcar blanca
150 g de chispas de chocolate (previamente refrigeradas)
2 huevos
1 pizca de sal
1 cucharada de vainilla
1 cucharadita de polvo de hornear
¿Cómo se preparan?
En un recipiente bate la mantequilla y el azúcar hasta que cremen. Entonces agrega la vainilla y los huevos. Bate todo enérgicamente hasta que todo se integre perfectamente.
Cuando tengas una masa homogénea, esparce las chispas de chocolate congeladas (también puedes agregar un poco de nueces en trozos).
La masa debe quedar compacta y maleable para que puedas armar bolitas con las manos. Humedece tus manos, haz las bolitas y colócalas en la bandeja de hornear previamente engrasada. Deja espacio entre las bolitas porque se aplastan y crecen.
Debes hornear durante 15 minutos (o hasta que se doren) en un horno precalentado a 190º C. No te sorprendas si ves que quedan muy blandas porque al enfriarse es que se endurecen.