A diferencia de las pancakes (panquecas o panqueques), las crepes son unas tortillas más finas, lo que las hace apetecibles para los que están a dieta o simplemente quieren bajar el consumo de carbohidratos. Son un plato versátil porque pueden ser un postre fácil, una merienda o una rica entrada salada
Aunque parecen simples de hacer porque al fin y al cabo son una mezcla no muy espesa de leche, harina y huevos, en realidad las crepes tienen sus trucos. Uno de los más comunes es agregarle a la mezcla, justo antes de extenderlas en la sartén o placa, un poquito de aceite o mantequilla derretida. También es importante dejar reposar la masa un rato, antes de cocinarlas, para permitir que la harina se hidrate por igual.
Los ingredientes básicos de una receta de crepes:
2 huevos
360 ml de leche
125 gramos de harina
Una pizca de sal
Aceite vegetal
Con la ayuda de la batidora, mezcla ligeramente los huevos y la leche, y agrega poco a poco la harina. Deja reposar 15 minutos. Agrega un chorrito de aceite vegetal y revuelve bien antes de empezar a cocinar las crepes en una sartén antiadherente, o engrasada con mantequilla o aceite de oliva.
A continuación otros trucos para que las crepes te queden perfectas:
También puedes probar estos rellenos para tus crepes:
Relleno salado: desmenuza el atún de una lata (previamente escurrido) y mézclalo con mayonesa, nueces trituradas y un poquito de mostaza. Extiende la crepe, coloca el relleno y haz un rollo. Esparce por encima ciboulette picadita.
Relleno dulce: mezcla queso crema con un poco de yogurt y un toque de azúcar, agrega fresas y melocotones picados en diminutos cuadritos. Rellena y enrolla, rocía con azúcar glass.