Esta técnica que permite el sudado de nuestros alimentos de manera lenta para que concentre sus jugos, especialmente de cortes de carnes, también podemos emplearla para vegetales con los mismos excelentes resultados.
El objetivo es ralentizar la cocción lo más que se pueda sin que los alimentos pierdan su textura, características y sabor. Esta manera de cocinar a fuego lento acompaña a la humanidad desde sus inicios y siempre nos remonta a lo ancestral y nutritivo; en español su nombre proviene de la palabra francesa “étouffer”, que significa asfixiar y por extensión sudar. Hoy la emplearemos en una rica receta con carne de ternera, veamos.

Ingredientes:
- 800 g papas
- 400 g pecho de ternera
- 2 dl vino blanco
- 2 tomates maduros
- 2 zanahorias
- 2 alcachofas
- 1 cebolla
- 2 dientes de ajo
- 1 ramita tomillo
- 1 hoja laurel
- 2 ramitas perejil
- 2 cda aceite de oliva
- pimienta negra
- sal
Preparación:
- Pelar las papas, lavarlas y trocearlas, rasgándolas. Partir la carne en dados de 2 x 2 cm. Raspar las zanahorias, lavarlas y cortarlas en rodajas. Limpiar las alcachofas y partirlas en cuartos. Verter agua en un cuenco y añadirlas, con la mitad del perejil lavado. Pelar la cebolla y los ajos, y picarlos.
- Dorar la carne por todos lados en una cazuela con el aceite. Añadir la cebolla y la zanahoria, y rehogar 4 minutos. Agregar el ajo y los tomates, lavados y troceados, y cocer 5 minutos. Incorporar las alcachofas escurridas y las papas, y salpimentar. Bañar con el vino y dejarlo reducir a la mitad.
- Lavar el tomillo y el laurel, y agregarlos a la cazuela. Verter 1 litro de agua, tapar y cocer 1 hora 30 minutos a fuego suave. Eliminar el tomillo y proseguir la cocción unos minutos más, hasta que espese. Retirar y añadir el resto del perejil, lavado y picado. Dejar reposar 10 minutos y servir.