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Tiempo 30 Minutos -
Tipo Postres -
Calorias 330 -
Dificultad Baja -
Porciones 12
Están de moda las tartas de queso sin horno, así que esta es una manera de complacer paladares sin llegar a cocinar el pastel y sin mayores complicaciones.
Las tartas de queso son muy antiguas, quizás milenarias, pero sólo comenzaron a tomar la forma que hoy conocemos desde hace unos 200 años. Recientemente cobraron notoriedad gracias a la Tarta de Queso La Viña, un postre vasco, que es una tarta sin corteza: sólo queso cremoso, huevos y azúcar.
Aquí te damos la receta de un coulis de maracuyá para que cubras esta tarta, aunque si lo deseas puedes comer esta tarta de queso sin mayores ornamentos.
(Foto principal: Diana Akhmetianova en Pexels)
Paso a paso para elaborar una tarta de queso sin horno
Nota
Puedes cubrir el pastel con coulis de otras frutas como fresas, mango o frutos rojos
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1. Combina los ingredientes
Cubre un molde desmontable de aro con papel manteca o papel de hornear para desmoldar más fácilmente.
Licúa el yogur con la leche condensada y la vainilla. Agrega la ricota por trozos a la mezcla en la licuadora, hasta donde el aparato logre mezclar (no tienes que forzarlo). Luego puedes verter la mezcla en un recipiente y terminar de agregar los trozos de ricota y mezclarlos poco a poco con la ayuda de una espátula.
Cuando termines de mezclar, vierte en el molde y refrigera por unas 4 horas. Lo mejor es dejarla de un día para otro.
(Imagen de charlykushu en Pixabay)
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2. Prepara la cobertura
Hidrata la gelatina en 1/3 de taza de agua fría durante unos 10 minutos. Si endurece, ponla en el microondas hasta que se vuelva líquida.
Aparte, mezcla la pulpa de la fruta con el azúcar, el agua y la gelatina líquida. Cuando tengas una mezcla homogénea viértela sobre el pastel de queso y vuelve a refrigerar.