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Tiempo 10 Minutos -
Tipo Italiana -
Calorias 20 -
Dificultad Baja -
Porciones 4
Esta es una salsa típica de la región de la Lombardía que se usa para acompañar el Ossobuco alla Milanese, un guiso de muslos de ternera. Pero con el tiempo, la Gremolata también se tomado para cubrir pescados, mariscos, espárragos y pasta, incluso se le usa con frecuencia para el risotto. Es una espléndida adición para cualquier plato porque combina ácidos con amargos.
Si tienes mortero será aún mejor, porque es la manera tradicional de hacer Gremolata o Gremolada (que significa molido). Pero también puedes valerte de un procesador o picatodo.
(Foto principal: By Popo le Chien - Own work, CC BY-SA 3.0, https://commons.wikimedia.org/w/index.php?curid=49071815)
¿Cómo se elabora una salsa Gremolata?
Nota
Puedes sustituir la ralladura de lima por la de naranja
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1. Maja los ingredientes
Lava bien el perejil. Usa sólo las hojas. Pela los ajos y córtalos a la mitad para extraer el germen (que es el gajito central que provoca problemas digestivos). Pica hojas y ajos finamente.
Ralla la lima (pero sólo la parte amarilla).
Tritura en un mortero las hojas, la ralladura de lima y los ajos. Agrega un poco de aceite de oliva y la sal.
(Foto de alleksana en Pexels)
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2. Pica finamente
Si prefieres usar licuadora o picatodo, podrás colocar un poco más de aceite de oliva e incluso una cucharada de jugo de limón. Pero cuida que la Gremolata no se convierta en un puré.
También puedes agregar y majar la salsa con la anchoa.
(Foto de Alesia Kozik en Pexels)