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Tiempo 75 Minutos -
Tipo Postres -
Calorias 180 -
Dificultad Baja -
Porciones 8
Esta es una versión moderna del Pao de Lo, que es un bizcocho tradicional de Portugal muy esponjoso. Lo sorprendente es que queda esponjoso sin polvo de hornear ni ningún otro leudante. Entonces, ¿cómo se logra esa textura? Al batir las claras a punto de nieve y también al batir muy bien las yemas.
El Pao de Lo original, cuando se corta, se desparrama como si fuera un coulant o volcán, porque se hornea por apenas 12 minutos. En este caso, este bizcocho esponjoso se hornea hasta que queda totalmente cocido.
(Foto principal: by Ali Tarhini ( Slashio ) on Unsplash)
Paso a paso para hacer el bizcocho esponjoso portugués
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1. Bate bien las claras
Enciende el horno a 160º C (325º F) y deja listo el molde en el que hornearás el bizcocho: engrasado y rociado con harina o cubierto con papel de hornear.
Empieza separando las yemas y las claras.
Añade a las claras una pizca de sal y bate a punto de nieve. Sube la velocidad de la batidora a medida que las claras se van montando. Deben quedar firmes (si volteas el recipiente, no se deben mover las claras).
(Foto de Katerina Holmes en Pexels)
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2. Mezcla cremosa
En otro recipiente mezcla las yemas con el azúcar y la vainilla (si la deseas). Debe quedar una mezcla cremosa y esponjosa con el doble de su volumen inicial. A continuación, añade la harina, previamente tamizada, por cucharadas. Incorpora la harina de manera envolvente, de tal manera de no perder la esponjosidad de las yemas.
Luego de integrada la harina, toca agregar las claras, poco a poco, y de manera envolvente también, para conservar el aire que al final será el que le dará la esponjosidad.
(Foto de Levent Simsek en Pexels)
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3. 50 minutos en el horno
Cuando todo esté integrado, vierte en el molde y lleva al horno durante 50 minutos o hasta que cuando pinches el centro del bizcocho con un palillo, éste salga limpio.
Antes de sacarlo, apaga el horno y lo dejas adentro, con la puerta entreabierta durante 15 minutos. Termina de enfriarlo sobre una rejilla y cuando esté frío espolvorea con azúcar glass.
(Photo by Bruno Oliveira on Unsplash)